Fuente: El Pais, Montevideo
Uruguay - Greenpeace acusa a dos barcos uruguayos de pescar ilegalmente
jueves 11 de abril de 2002
Sydney | EFE
La organización ecologista Greenpeace ha acusado hoy jueves a dos barcos
uruguayos de pescar ilegalmente bacalao, también conocido como merluza
negra, en las aguas antárticas australianas.
El portavoz de Greenpeace en Asuntos Oceánicos, Quentin Hanich, dijo a EFE
que su organización tiene fotografías las cuales de muestran que los barcos
uruguayos ``Arvisa'' y ``Dorita'' faenaron ilegalmente en aguas antárticas
australianas.
Los dos pesqueros fueron avistados el pasado mes de enero por el buque
australiano ``Aurora Australis'', con nombre y banderas falsas, agregó
Hanich. Pero al ser interrogados por el capitán de la nave australiana, los
pesqueros uruguayos insistieron en que sólo ``inspeccionaban la zona'' y
negaron todo vínculo con las redes encontradas en los alrededores.
Greenpeace también acusó al Gobierno de Montevideo de encubrir las
actividades de los dos barcos pesqueros al otorgar documentación que indica
falsamente que cumplen con las regulaciones establecidas por la Conservación
de Recursos Marinos Vivos de la Antártida (CCAMLR, siglas en inglés).
Ese organismo, del que forman parte Uruguay y Australia, administra los
recursos marinos del continente blanco. Hanich dijo que Montevideo, ``en
lugar de confiscar los pesqueros y su carga, apoya activamente a estos
piratas al autorizar su documentación ante la CCAMLR y al facilitar la
introducción de la pesca en mercados legales''.
Greenpeace instó a Australia que abogue a favor de una moratoria a la
captura de merluza negra y para que se otorguen más poderes a CCALMR para
regular las actividades pesqueras en las aguas antárticas.
La organización ecologista asegura que la población de bacalao de
profundidad ha sido llevada ``al borde del colapso'' debido a la pesca
ilegal de esta especie, calculada por los ecologistas en por lo menos unas
30.000 toneladas anuales.
El bacalao de profundidad (Dissostichus eleginoides), que de adulto llega a
medir dos metros, era una especie poco conocida hasta que pescadores
chilenos atraparon uno de ellos en 1982. Desde entonces, se ha convertido en
uno de los manjares gastronómicos del mundo y el precio del ejemplar puede
alcanzar hasta los mil dólares.