Fuente: El Peruano, Lima

Perú - El primer viaje del Humboldt rumbo al Continente Blanco

lunes 30 de enero de 2023

Perú - El primer viaje del Humboldt rumbo al Continente Blanco

Hace 35 años, el 4 enero de 1988, zarpó rumbo a la Antártida la primera expedición del BIC Humboldt.

Por José Antonio Vadillo Vila
Periodista

29/01/2023
El Peruano, Lima
https://www.elperuano.pe/noticia/203236-humboldt-viaje-1

El primer navegante peruano que llegó a la Antártida fue un cholo sabio y corajudo. El nombre del inca Túpac Yupanqui (1441-1493) urge incluirse entre los grandes navegantes del globo, pues llegó hasta la Oceanía. Y con él, nació también nuestra vocación antártica.

La segunda vez que llegamos al Continente Blanco sucedió quinientos años después, cuando la historia se escribía en los periódicos y los marineros, más que sextantes, navegaban con instrumentos electrónicos modernos.

El lunes 4 de enero de 1988, el buque de investigación científica (BIC) Humboldt zarpaba desde el puerto naval del Callao rumbo a la Antártida y había mucho interés de la prensa porque se trataba de un hecho histórico: el país hacía la primera expedición científica a la Antártida. Se iniciaban así la era de las campañas científicas del Perú a la Antártida (Antar).

El jefe de la expedición (también lo sería de la segunda expedición) fue el capitán de navío Jorge Brousset Barrios. El marino y parte de los científicos peruanos que participaron de la misión no eran neófitos: ya habían participado en misiones al Continente Blanco realizadas por otros países vecinos, en calidad de invitados.

Con Brousset viajaban 35 oficiales de la Armada Peruana. Y en Punta Arenas (Chile) se unirían a la tripulación 50 investigadores; entre ellos, 15 de universidades peruanas y 10 del Instituto del Mar. Se trataba de biólogos, oceanógrafos e historiadores, y otros especialistas.

Los científicos y funcionarios fueron trasladados desde Lima en un avión Hércules L-100 de la Fuerza Aérea del Perú (FAP) y subieron al buque científico peruano en Punta Arenas el 20 de enero.

Una piedra y Vallejo

Además de sus herramientas de investigación oceanográficas y ambientales, en su primer viaje el Humboldt llevó una piedra de granito, donde estaba cincelada la frase “Primera expedición científica peruana enero-febrero 88”.

La piedra también contenía un verso del poema “Las piedras”, de César Vallejo: “Las piedras no ofenden; nada/ codician. Tan sólo piden/ amor a todos, y piden/ amor aun a la Nada.”

El entonces presidente de la República, Alan García Pérez, llegó a la ceremonia de zarpe acompañado por el canciller Allan Wagner (quien también era presidente de la Comisión de Asuntos Antárticos) y el vicepresidente Luis Alberto Sánchez. Bautizó a la roca como “la primera piedra de la base Machu Picchu” en la Antártida. Esta base, conocida después como ECAMP, comenzaría a operar a partir del año siguiente. Pero esa es otra historia.

Ciencia a bordo

Había mucha curiosidad por llegar al Continente Blanco, donde el verano dura medio año y el sol sale las 24 horas al día. La primera expedición peruana a la Antártida tuvo como plan realizar siete programas de investigación científica, que se darían tanto durante la travesía como en la zona antártica per se.

A pesar de ser tiempo de verano en el continente antártico, los expedicionarios llevaban para su trabajo una indumentaria especial que les cubría todo el cuerpo y el rostro, al que añadían gafas especiales para hacer frente al clima gélido.

De acuerdo al cronograma, 19 días más tarde, el 23 de enero, el BIC Humboldt llegó al Continente Blanco. Fue cuando ingresó al estrecho de Bransfield. Exactamente cuando el Humboldt se encontraba en la latitud 62 grados y 12 minutos sur y una longitud de 63 grados y 31 minutos, la misión sentó la presencia del Perú en la Antártida.

García Pérez subiría al BIC Humboldt tras la ceremonia y acompañaría a los tripulantes durante un breve trecho a la salida del Callao. Recordó que el 23 de enero significaría “una preocupación creciente para nuestras generaciones futuras, sobre todo por la riqueza aún no descubierta en la Antártida”.

Por esos años ya se empezaba a estudiar las bondades del “krill”, que, sin depredarse, decían podían alimentar a la humanidad entera, gracias a su alto contenido proteínico.

Y del potencial energético el secretario general de las Naciones Unidas, Javier Pérez de Cuéllar, lo había resumido mejor: “La plataforma continental de la Antártida podría contener petróleo potencialmente extraíble de una magnitud de decenas de miles de millones de barriles”.

EL BIC Humboldt avanzaría con una velocidad de 14 nudos llevando a la expedición peruana hasta la isla Rey Jorge, donde permanecería 27 días desarrollando observaciones científicas y evaluaría las condiciones para instalar la futura ECAMP.

Presencia geopolítica

La llegada del Perú al contienen antártico tenía también un fin geopolítico: convertir al Perú en miembro consultivo del Tratado de la Antártida con derecho a voto tal como Argentina, Brasil, Chile, Uruguay y otros.

El Perú quería una presencia allá por los valiosos recursos naturales que alberga y la posición geográfica. Se decía ya que la Antártida podía salvar a la humanidad del hambre.

Llegar al Continente Blanco era parte de una estrategia regional, ya Argentina tenía 13 bases instaladas. La idea de los países latinoamericanos era velar para que el continente de nieves perpetuas no se convierta en un enclave militar de las grandes potencias.

Tras su periplo de casi dos meses, el 1° de marzo de 1988, cinco días antes de lo previsto, el Humboldt ancló de nuevo en el puerto del Callao. Había cumplido así su primera misión. (Con información del Centro de Documentación Cendoc-El Peruano)

Sobre el BIC

El Humboldt, la histórica embarcación científica peruana de 76.20 metros de eslora, fue construido en el Servicio Industrial de la Marina (Sima), gracias a un convenio con el Gobierno alemán. Zarpó en 1978 y se dedicó desde entonces a la investigación pesquera. Cada año tuvo por rutina hacer viajes al Continente Blanco con fines científicos, de diciembre a marzo, aproximadamente. Tras terminar sus viajes a la Antártida en el 2013, retomó sus labores de investigación marina a cargo del Instituto del Mar del Perú. Desde el 2017, el buque oceanográfico con capacidad polar BAP Carrasco está a cargo de las misiones científicas a la Antártida.

Datos

Para la primera expedición, el Perú invirtió 300,000 dólares en divisas y 700,000 dólares en moneda nacional.

También participaron en la misión representantes del Concytec, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Instituto Geofísico del Perú y la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina.

Para su primer viaje a la Antártida, el casco del Humboldt fue reforzado para soportar el clima extremo y el hielo.

En el 2003, un reportero y un fotógrafo de El Peruano viajaron a la Antártida como parte de la misión Antar XIV.

Cifra:

86 personas, incluidos 36 científicos, participaron de la misión.