Fuente: El Comercio, Lima
Peru - Ministro de Pesqueria: Amante de la caza bajo el mar
sábado 9 de febrero de 2002
La pasión de Reátegui por el océano le viene de familia, pues su padre fue
marino y además pasó sus primeros años en La Punta, por lo que se considera
chalaco de corazón. Pero recién empezó a conocer el mar a fondo cuando su
papá le regaló a los 12 años una máscara, un par de aletas y un arpón, con
los cuales pudo hacer sus primeros pininos en la caza submarina, desde
entonces no deja de practicar su deporte favorito.
¿Quién le enseñó? Sus amigos. Lo aprendió en las playas de Punta Hermosa y
Pucusana. Cuando ganó experiencia se sumergió en las islas Pachacamac, San
Lorenzo y las de Chincha, para luego recorrer prácticamente todo el litoral
peruano. También lo hizo en Panamá y la isla de Pascua, donde quedó
impresionado por coloridos corales y las transparentes aguas.
Reátegui fue un asiduo deportista durante 20 años, al mismo tiempo que se
convirtió en dirigente de la Federación de Caza Submarina, por lo que le
tocó organizar innumerables campeonatos nacionales y dos mundiales. Entre
sus trofeos mayores están varios meros de 15 kilos y un fortuno de 12 kilos.
En Bayóbar sufrió un gran susto porque la mar brava no lo dejaba salir a
flote cuando pescaba entre las rocas. También pudo escuchar el gran ruido
que origina un temblor bajo el mar, cuando cazaba en la costa sur.
Como experto buzo respeta a los tiburones, rayas y morenas, pero se cuida
más de los lobos marinos, porque son especialista en robar los peces que se
capturan.
Con entusiasmo refiere que entrenado puede soportar más de minuto y medio
sumergido a una profundidad no mayor a los 20 metros. Explica que en su
especialidad solo utiliza el oxígeno de sus pulmones.
A este ministro también le gusta correr las olas sobre tablas, pero ahora
por falta de entrenamiento lo hace en "morey boogie" (una tabla pequeña). Su
playa favorita es Punta Hermosa y siempre va acompañado de su familia.