Peru - Chimbote: Pesqueras no escarmientan

miércoles 9 de abril de 2003

En operativo, municipio vuelve a detectar irregularidades en higiene.
Sipesa y Chaveycel no abrieron sus puertas

Las empresas de harina y conserva de pescado no se inmutan con las advertencias del municipio provincial. Ayer, en un nuevo operativo inopinado, representantes de la Dirección de Salud y Medio Ambiente de la comuna, acompañados por el presidente de la Comisión de Salud, regidor Leandro Pérez Rodríguez, volvieron a toparse con puertas cerradas e infracciones referidas a la falta de higiene con que operan en estas plantas de procesamiento.

El operativo comenzó alrededor de las 11.30 de la mañana y se extendió hasta pasada la 1 de la tarde, lapso en que se visitó a cinco de estas empresas ubicadas en Miramar Bajo, Florida Baja y la zona industrial Gran Trapecio.
Como resultado, los funcionarios ediles multaron por la cantidad de 6 mil 200 nuevos soles -equivalente a dos unidades impositivas tributarias (UIT)- a las empresas Sipesa y Chaveycel S.A, las cuales se negaron a abrir sus puertas; mientras que sancionaron a otras dos por cantidades menores a un UIT por presentar diversas deficiencias.

. EL OPERATIVO

La acción de fiscalización se inició en la Empresa Envasadora Fakiú que, pese a no estar en funcionamiento, mostró serias falencias en lo que a higiene y seguridad se refiere; es decir, no mostró extintores operativos ni certificado de fumigación vigente, sólo un botiquín con medicinas vencidas que le valieron una multa correspondiente al 50% de una UIT. La encargada de Fakiú, María Olivares de Chu, se alteró y justificó las pobres condiciones de la fábrica con la paralización de sus actividades desde enero.

La siguiente parada fue Sipesa, empresa que en un principio se negó a abrir sus puertas a los inspectores y policía municipal. El trato despectivo del vigilante que sólo autorizó el ingreso del regidor Pérez Rodríguez originó que se le impusiera una papeleta por un valor de dos UIT, bajo el cargo de impedir el ingreso a las autoridades. Ante la advertencia, un funcionario de la empresa intentó disculparse para evitar la multa, pero fue demasiado tarde.

Situación similar ocurrió con la fábrica Chaveycel S.A que tampoco permitió la inspección, mientras que Empresa Inversiones Rigel S.A y Corporación Pesquera San Francisco sí lo hicieron, y demostraron tener a simple vista sus instalaciones en óptimo estado; sin embargo descuidaron detalles como la falta de limpieza en los servicios higiénicos en el primer caso, y falta de carnés sanitarios de los trabajadores en el segundo. En estos casos, Rigel S.A simplemente fue notificado, en tanto que San Francisco deberá pagar el valor de una UIT.