Fuente: El Comercio, Quito

EE.UU - Un salmon sera el primer animal transorganico para consumo humano

viernes 7 de febrero de 2003

Washington.
Un salmón transgénico, que engorda dos veces más rápido y come mucho menos que el salmón de siempre, inaugura la era de los animales genéticamente manipulados para consumo, y Estados Unidos podría autorizar en poco tiempo su comercialización.

Los investigadores que lo crearon tomaron un salmón del Atlántico central y le agregaron un gen de un pez de otra especie, el gado, que codifica una proteína anticongelamiento. Por medio de ese procedimiento, lograron acelerar en 200% el proceso de maduración del salmón "normal".

Se estima que el salmón transgénico llegará a las pescaderías unos dos años luego de la autorización. Luego será el turno de la trucha y otras especies, cuya comercialización es objeto de una demanda presentada en la agencia federal para la seguridad alimenticia y farmacéutica de Estados Unidos (FDA).

Los nuevos salmones "podrían ser servidos en las mesas estadounidenses en dos años", dijo el director del grupo de investigación independiente Pew Initiative on Food and Biotechnology, Michael Rodemeyer, que a fines de enero organizó una reunión sobre el tema en el Congreso.

La nueva variedad de salmón fue diseñada por Aqua Bounty Farms, una pequeña empresa de Masachusetts (noreste) que según los expertos tiene serias posibilidades de obtener la autorización de la FDA.

Los científicos asociaron el gen anticongelamiento a la hormona de crecimiento del salmón, permitiéndole crecer incluso en invierno, cuando normalmente casi no aumenta de peso, dijo el presidente y cofundador de la empresa, Elliot Entis. En el pez modificado, "la hormona de crecimiento es producida todo el año", explicó.

Además, la proteína anticongelamiento tiene un efecto acelerador sobre la secreción de la hormona del crecimiento al inicio del ciclo de vida del pez, lo que también ayuda a explicar el extraordinario ritmo de crecimiento, dijo Entis en Washington, donde presentó el trabajo de su empresa.

Ante el riesgo de que el gen modificado se traslade a otros peces mediante cruzas, los investigadores proponen sólo comercializar hembras transgénicas esterilizadas. De ese modo sería imposible su cruce con peces salvajes.

"En esta etapa todavía no podemos prever el efecto de la introducción de un transgénico" en la naturaleza, advirtió el especialista en biotecnología animal Eric Hallerman.

Sin embargo, "es probable que peces transgénicos logren escaparse" y "el cruce con especies salvajes implica un riesgo", afirmó.

Por otra parte, Hallerman minimizó posibles riesgos para el consumo humano.
"La mayoría de las proteínas y polipéptidos resultan degradados por la cocción y la digestión", explicó.

Para el genetista Bill Muir, de la Purdue University (Indiana, centro), las posibilidades de que Aqua Bounty Farms convenza a la FDA dependen de los "datos empíricos" sobre sus peces.

La empresa podría obtener una autorización si puede demostrar "que sus peces genéticamente modificados no tienen un valor de adaptación superior para viabilidad, reproducción o fertilidad", explicó.

Actualmente, Estados Unidos carece de instancias específicas para evaluar los riesgos presentados por un pez transgénico como este, por lo que la FDA deberá considerarlo como un medicamento y someterlo al mismo proceso de autorización, explicó el grupo de investigación Pew. AFP