Fuente: El Comercio, Quito
Ecuador - La pesca pagara una tasa en Guayas
miércoles 7 de agosto de 2002
Redacción Guayaquil
Santa Rosa y Anconcito miran al mar, al imponente Pacífico, pero carecen de servicios básicos, infraestructura vial, parques y obra pública. Los dos puertos pesqueros que pertenecen al Municipio de Salinas, en la península de Santa Elena (Guayas), ya tienen una estrategia para conseguir recursos: un tributo por el marisco que salga de sus playas e improvisados muelles.
"Los verdaderos beneficiados desde que nos constituimos como puerto hace 60 años, son las 20 empresas que aquí laboran: frigoríficos, centros de acopio, empacadoras y exportadoras", asegura el presidente de la Junta Cívica de Santa Rosa, Rafael Tigrero, uno de los impulsores de la nueva ordenanza municipal, emitida el 25 de enero.
Según la disposición, los vehículos de exportadoras, pesqueras, pequeños y medianos comerciantes que carguen en ambos lugares pagarán 30 centavos de dólar por quintal. Las juntas cívicas de ambas parroquias administrarán los fondos que serán destinados al mantenimiento y conservación del malecón, parques centrales, vías de acceso a los puertos y otros servicios, como el pago de guardianes.
La ordenanza, de una página y cinco artículos, regirá en tres semanas según el alcalde Vinicio Yagual, ex cefepista. Él puso en ejecución el pasado 19 de junio el Plan Estratégico Participativo de Desarrollo, en el que constan las seis parroquias de Salinas (dos rurales y cuatro urbanas). La idea es impulsar el desarrollo turístico, económico y social del sector, que ha estado relegado.
Lo que aún no está resuelto es el sistema de pesaje automatizado. "Este será instalado con los recursos que lleguen por el cobro. Hasta tanto se hará un control empírico de cada gaveta llena de marisco que lleven los carros". Es lo que ocurre hace más de dos años en Chanduy (recinto de Santa Elena), un puerto industrial a 20 kilómetros de la vía Guayaquil-Salinas y el más importante de la provincia junto al de Monteverde. Ernesto Del Rosario, presidente de la comuna, asegura que los ingresos son revertidos en obras, "aunque antes hubo problemas de malas administraciones".
La medida es positiva, siempre que se aproveche correctamente el dinero, opina el gerente de Pesquera del Pacífico, Agustín Jiménez. "Los tributos no pueden ser exagerados y deben administrarse bien. ¿De qué vale si se cobra y no hay resultados", dice.
La estrategia de vivir del mar
Anconcito, rural . Es parroquia rural desde 1937. Ahora se instala la red de alcantarillado y hace 20 meses hay agua potable. Su nombre original era Ancón, que ahora es un campamento petrolero.
Puerto de guerra . Santa Rosa es parroquia urbana desde el 24 de mayo del 2001. Sus habitantes eran originarios de la ensenada de Salinas (espacio que se cedió a las FF.AA. por la guerra del 41). Antes perteneció a la parroquia Rocafuerte.
Paradojas del puerto . El panorama en Santa Rosa, en sus 124 hectáreas y 1
483 viviendas, es disímil. Contrasta la infraestructura de las compañías y las pequeñas pangas de los pescadores que viven en seis humildes barrios.