Fuente: La Nacion, Buenos Aires 09.04.2002
Argentina - Reprodujeron lenguados en cautiverio
martes 9 de abril de 2002
Por primera vez: en la Estación Experimental de Maricultura de Mar del Plata
Es parte de un proyecto para desarrollar la tecnología y luego transferirla
a la industria privada
El fin último de este trabajo es la creación de granjas marinas
También están investigando con besugos
Crearán semillas a escala comercial
MAR DEL PLATA.- Desde hace unos días, varios miles de alevinos de lenguado
nacidos en cautiverio nadan en los tanques de la Estación Experimental de
Maricultura del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero
(Inidep).
Los movimientos del juvenil cardumen son vigilados día y noche con especial
atención por los científicos del organismo, pues es la primera vez que es
reproducida en un laboratorio argentino esta valiosa especie marina.
El logro entusiasma a los biólogos de la estación porque forma parte de un
proyecto destinado a poner a punto la tecnología de cultivo de lenguado para
luego transferir esos conocimientos al sector privado.
El fin último apunta a la creación de granjas marinas en nuestras costas y,
en un futuro menos inmediato, la repoblación del Mar Argentino.
"Estamos trabajando con lenguado y besugo para producir semillas de estos
peces a escala comercial", explicó a LA NACION el biólogo marino Gabriel
Bambill, uno de los responsables del programa.
"La reproducción del besugo fuera de su ambiente natural no resultó tan
complicada, pero con el lenguado, tal como preveíamos, la exigencia fue
mucho mayor y recién ahora logramos esta multiplicación exitosa y
multitudinaria a la vez", añadió.
La tarea que se realiza en la sede del Inidep cuenta con el apoyo técnico y
económico de la Overseas Fishery Cooperation Foundation (OFCF), agencia
oficial japonesa con la que la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Pesca y
Alimentación de la Nación firmó, en diciembre de 1999, un convenio para la
"transferencia de tecnología para la producción masiva de semilla de besugo
y lenguado".
Además, la entidad nipona donó los dos millones de dólares necesarios para
construir y equipar las instalaciones que sirven de escenario a esta
singular experiencia.
Una granja sobre la escollera
Como una suerte de granja experimental, la Estación de Maricultura del
Inidep funciona en uno de los pabellones del edificio que el organismo posee
en la Escollera Norte marplatense, a pasos de la Base Naval local. Es el más
nuevo -fue inaugurado el 3 de diciembre de 2001- y en sus 1500 metros
cuadrados cubiertos y en los playones aledaños se distribuyen el módulo de
reproductores, el de cría de larvas, el de preengorde y engorde, el
laboratorio de microalgas, la sala de concentración de microalgas, otros
laboratorios, oficinas y almacenes.
"Mientras se levantaba este complejo, pasé tres meses en Japón
familiarizándome con las instalaciones y la metodología que se aplicaría
aquí en la Argentina -apuntó Bambill-. Al regresar, junto con los
especialistas de la OFCF pusimos en marcha el proyecto y ya tenemos
prácticamente a punto el ciclo vital completo de las dos especies,
incluyendo la producción de los alimentos necesarios para cada estadio de
los ejemplares."
Se trata de microalgas, diminutos crustáceos y una ración balanceada con la
que se alcanza la madurez comercial de los peces.
"Con la reproducción exitosa del lenguado, hace pocos días, abrimos una
nueva etapa, que se cerrará cuando los especímenes alcancen un kilogramo",
explicó.
Esta meta se alcanza a los 18 meses de nacidos, aproximadamente.
Se estima que la estación ya está en condiciones de producir 10.000
juveniles de 20 milímetros de longitud, 5000 de 100 y 1000 lenguados de un
kilogramo, por ciclo.
Mediante el manejo del fotoperíodo y la temperatura del agua, serán tres los
ciclos que se cumplirán por año.
En cuanto a la transferencia al sector privado, ya se están realizando
contactos con empresarios para proveerlos de estas semillas , de modo que se
realice fuera del Inidep el engorde. Así se ajustará la tecnología y se
establecerán los costos y la rentabilidad de la actividad.
"Estamos preparados para asesorar a quienes se decidan a montar una granja
marina y ya hemos detectado que las mejores áreas para instalarlas son las
costas de Mar Chiquita, Samborombón y Bahía Blanca", destacó Bambill.
"Esta actividad es nueva para nosotros -apuntó-, pero en otros lugares se
desarrolla desde hace 50 años en forma promisoria. El mercado está en
expansión y se calcula que la cotización del lenguado se mantendrá constante
o aumentará durante el decenio que viene.
"En cuanto a la repoblación del Mar Argentino, ésa es la misión que nos
aguarda no bien la maricultura deje de ser una palabra extraña a nuestro
vocabulario", auguró el científico.
Por Oscar Balmaceda
Corresponsal de LA NACION