Paita y la merluza gayi

Autor: Lizardo Ayon Valdiviezo, Ingeniero Pesquero, Gerente General de Asociación Paita

lunes 10 de julio de 2023

Paita y la merluza gayi

Paita y la merluza gayi


Por. 


Ingeniero Pesquero, Lizardo Ayon Valdiviezo.


Gerente General de Asociación Paita Corporation.


En el año 2002, la merluza peruana fue declarada en recuperación, por la disminución de su disponibilidad y la escasa presencia de ejemplares adultos, desde esa fecha en recurso merluza es monitoreado permanentemente y se ha logrado un sistema de pesca responsable, precautoria, gracias al esfuerzo conjunto de PRODUCE; IMARPE, armadores pesqueros y pescadores, lográndose un importante cambio en su administración; de ser plenamente explotado, paso a ser hoy en día un recurso que soporta una actividad económica pesquera sostenible.


21 años después podemos decir que tenemos una merluza saludable, gracias a un esfuerzo inaudito dentro de la gran variabilidad oceanográfica que impacta en el ciclo de vida normal de este recurso. Se debe reconocer la guía científica del Instituto del Mar del Perú (IMARPE), desde su sede central y el laboratorio costero Paita, se toman los datos y se analiza el proceso por parte de los técnicos científicos de investigación (TCI) que han trabajado a bordo de las naves merluceras. Así mismo con el apoyo de la Embarcación Mónica 3 con su CTD, que toma muestras del mar para su análisis y seguimiento de las condiciones del mismo, esto es una conjunción Empresa – investigación propia – IMARPE.


Nuestra merluza (Merluccius gayi peruanus), al igual que otros recursos del mar del Perú, como la anchoveta, pota, jurel, caballa, sustentan la pesquería peruana, generando miles de puestos de trabajo, divisas y bienestar. Especialmente cuando el hábitat de estas pesquerías, está en condiciones normales.


Desde el año 2020, las condiciones frías de La Niña, hace que la pesquería de merluza no se haya desarrollado en condiciones normales, más bien su biomasa se desplazó al Ecuador, ya que es compartida con el país norteño, y de esta forma las estadísticas de pesca, presentaron porcentajes muy bajos y con tallas, que apenas superaban lo mínimo requerido (20% de individuos menores a 28 cm.).


Durante estas anomalías, en las que el mar obtiene, temperaturas superiores o inferiores a las que normalmente se presentan, Niña (+Frías) y Niño (+Calientes), las especies migran al Norte, o al sur, siendo su captura más difícil, hechos que impactan la economía y por ende la parte social.


Paita tiene infraestructura pesquera para consumo humano, tanto en naves, como en plantas procesadoras, qué la convierten en casi el 95% de uso de este recurso, que casi en su totalidad se exportan en filetes a Europa o a otros países del orbe. Es nuestra realidad, los peruanos preferimos otras especies, para nuestra dieta cotidiana.


Después de una prolongada Niña de tres años, el Comité Multisectorial para el estudio del Fenómeno del El Niño, nos indica, que estamos próximos a un FEN NIÑO GLOBAL, según sus estimaciones, afectara a nuestras costas desde noviembre, muy probablemente, con lo que esta pesquería, no seriá accesible a nuestra flota y por ende a las plantas procesadoras, que vienen sintiendo desde el año 2020 una baja muy sensible del recurso.


Debido a las condiciones frías, de la Cuota de captura permisible otorgada el año 2022-2023 por 47,287 Tm, solo el 26.5 % es decir, 12.488.90 Tm de merluza se ha podido extraer.


Acaba de darse la Cuota 2023-2024, en una Resolución Ministerial, muy precisa, que se ha obtenido de la data del año pasado, dado que hoy, con estas condiciones, eran difícil realizar la operación merluza 36, dentro de sus precisiones, indica, que de mejorar las condiciones meteorológicas, se hará la prospección científica, y si hay evidencias del recurso se dará un aumento a los Límites Máximos de Captura Permisible (LMCP).


Como Ingeniero pesquero, he podido observar al recurso en El Niño del 1983, el Niño del 1997, y luego el del 2015-2016, considero, por lo tanto, que solo nos quedarían, unos pocos meses para extraer merluza, ya que esta seguramente se está profundizando y dispersando, es muy importante realizar observaciones, monitoreo, operaciones de pesca, y otras de carácter científico, y el estado debe preocuparse por tener expedito los barcos de investigación científica del IMARPE, porque este es el momento de realizar estos cruceros y observar donde está el recurso. 


Estas alteraciones en el comportamiento de los recursos nativos del Perú, que son consecuencia de estas anomalías, que cada vez son más cíclicas en nuestro mar, hacen  que hoy en día sea muy importante realizar estos estudios científicos, mientras tanto, están presentándose recursos de oportunidad, que deben de ser considerados, como una alternativa para las naves que por estas condiciones no pueden acceder a sus recursos natos.


Nuestros informes de Asociación Paita, y los del IMARPE, son precisos, basta de alarmar a la población calificando a esta pesquería como depredada o sobreexplotada. Esta letanía la vengo escuchando desde hace 23 años, sin que la merluza haya desaparecido desde entonces.


Resumiendo, creo que los patrones de comportamiento de la merluza en un FEN, Niña o Niño los podemos definir así:


Primero: Profundización repentina del recurso, que pone fuera del alcance de la flota.


Segundo: Desplazamiento del recurso a latitudes más al sur del Perú, en el año 97 se localizó frente a las regiones de Lambayeque y La Libertad.


Normalmente en Paita debería estar en 18º centígrados, y hoy, en pleno julio 2023, está sobre 23º centígrados, la salinidad promedio debería estar en 35 ups, y está sobre este promedio, y el oxígeno de 2 ml/L hoy tiene valores de 0.5%. Estos valores nos indican que el recurso se alejara de sus áreas tradicionales de pesca, generando además escasez en la mesa popular, paralizando la industria, y reduciendo puestos de trabajo. El estado puede y debería propiciar alternativas, como cuotas sociales, bonos y otros, para apoyar no solo al pescador, sino también a las empresas procesadoras.