EL SECTOR PESQUERO Y LA TRIBUTACION

Autor: Marcos Kisner Bueno

sábado 10 de diciembre de 2005

EL SECTOR PESQUERO Y LA TRIBUTACION

EXPORTACIONES DEFINITIVAS DE HARINA Y ACEITE

en miles de dólares FOB Fuente: Sunat

EXPORTACIONES TRADICIONALES
TOTAL
HARINA ACEITE

1998 394.36 18.10 412.46
1999 532.66 68.06 600.72
2000 874.03 80.64 954.67
2001 835.07 91.15 926.22
2002 823.15 69.19 892.34
2003 742.23 79.07 821.30
2004 954.46 149.23 1,103.69
TOTAL 5,155.96 555.44 5,711.40

EXPORTACIONES DE LOS DEMAS PRODUCTOS PESQUEROS

EXPORTACIONES
NO TRADICIONALES


226.09
190.26
186.49
207.65
174.58
210.19
283.93
1,479.19

TOTALES

TOTAL PESCA T.C
US$ TOTAL SOLES


638.55 3.157 2,015.90
790.98 3.507 2,773.97
1,141.16 3.527 4,024.87
1,133.87 3.441 3,901.65
1,066.92 3.517 3,752.36
1,031.49 3.467 3,576.18
1,387.62 3.282 4,554.17
7,190.59 24,599.09





EXPORTACIONES TOTALES DEL PAIS (TODOS LOS SECTORES)

TOTAL EXP TRAD TOTAL EXP N/TRAD OTROS TOTAL EXPORT
1998 3,721.28 1,981.71 22.85 5,725.84
1999 4,150.82 1,878.08 13.02 6,041.92
2000 4,806.36 2,053.32 22.51 6,882.19
2001 4,731.02 2,194.35 30.88 6,956.25
2002 5,371.49 2,269.74 24.03 7,665.26
2003 6,356.30 2,625.59 44.75 9,026.64
2004 8,855.23 3,533.08 46.58 12,434.89
TOTAL 37,992.50 16,535.87 204.62 54,732.99


PARTICIPACION TOTAL DEL SECTOR PESQUERO EN LAS EXPORTACIONES TOTALES

TOTAL PESCA PORCENTAJE
1998 5,725.84 638.55 11.15%
1999 6,041.92 790.98 13.09%
2000 6,882.19 1,141.16 16.58%
2001 6,956.25 1,133.87 16.30%
2002 7,665.26 1,066.92 13.92%
2003 9,026.64 1,031.49 11.43%
2004 12,434.89 1,387.62 11.16%
TOTAL 54,732.99 7,190.59 13.14%

PARTICIPACION HARINA Y ACEITE EN LAS EXPORTACIONES TOTALES

TOTAL HARINA ACEITE PORCENTAJE
1998 5,725.84 412.46 7.20%
1999 6,041.92 600.72 9.94%
2000 6,882.19 954.67 13.87%
2001 6,956.25 926.22 13.31%
2002 7,665.26 892.34 11.64%
2003 9,026.64 821.30 9.10%
2004 12,434.89 1,103.69 8.88%
TOTAL 54,732.99 5,711.40 10.44%

PARTICIPACION OTROS PESQUEROS EN LAS EXPORTACIONES TOTALES
(Conservas, curados, congelados, fresco refrigerado, peces vivos y ornamentales)

TOTAL OTROS PORCENTAJE
1998 5,725.84 226.09 3.95%
1999 6,041.92 190.26 3.15%
2000 6,882.19 186.49 2.71%
2001 6,956.25 207.65 2.99%
2002 7,665.26 174.58 2.28%
2003 9,026.64 210.19 2.33%
2004 12,434.89 283.93 2.28%
TOTAL 54,732.99 1,479.19 2.70%





RENTA Y REGULARIZACION TERCERA CATEGORIA

en millones de soles Fuente: SUNAT

RENTA

TOTAL PAIS PESCA PARTICIPACION
1998 2,913.20 13.50 0.463%
1999 2,255.10 5.70 0.253%
2000 2,460.60 10.10 0.410%
2001 2,938.80 11.70 0.398%
2002 3,164.40 15.40 0.487%
2003 4,752.40 43.40 0.913%
2004 5,386.20 41.30 0.767%
TOTAL 23,870.70 141.10 0.591%


EXPORTACIONES TOTALES RENTA PAGADA PORCENTAJE
PESQUERAS EN SOLES
98 2,015.90 13.50 0.670%
99 2,773.97 5.70 0.205%
00 4,024.87 10.10 0.251%
01 3,901.65 11.70 0.300%
02 3,752.36 15.40 0.410%
03 3,576.18 43.40 1.214%
04 4,554.17 41.30 0.907%
24,599.09 141.10 0.574%


DESEMBARQUE DE PESCADO FRESCO EN TM

OTROS PUERTOS TOTAL
PUERTOSCONOCIDOS
1998 5,298.00 243,866.00 249,164.00
1999 14,736.00 241,011.00 255,747.00
2000 67,080.00 250,114.00 317,194.00
2001 45,477.00 293,915.00 339,392.00
2002 68,916.00 239,431.00 308,347.00
2003 104,166.00 225,269.00 329,435.00
TOTAL 305,673.00 1,493,606.00 1,799,279.00


TOTAL OTROS PORCENTAJE
PUERTOS
1998 249,164.00 5,298.00 2.13%
1999 255,747.00 14,736.00 5.76%
2000 317,194.00 67,080.00 21.15%
2001 339,392.00 45,477.00 13.40%
2002 308,347.00 68,916.00 22.35%
2003 329,435.00 104,166.00 31.62%
TOTAL 1,799,279.00 305,673.00 16.99%



REGIMEN DE EXPORTACION DEFINITIVA - PRINCIPALES 500 EMPRESAS
Enero - Diciembre 2004
( Miles de Dólares )

EMPRESA VALOR FOB FOB %

TOTAL 12,434,888.98 100.00

TOTAL PRINCIPALES EMPRESAS 11,775,556.94 94.70
1 20100147514 SOUTHERN PERU COPPER CORPORATION 1,374,888.91 11.06
2 20137291313 MINERA YANACOCHA S.R.L. 1,233,233.62 9.92
3 20330262428 COMPANIA MINERA ANTAMINA S.A 1,007,175.20 8.10
4 20376303811 DOE RUN PERU S.R.L. 504,097.13 4.05
5 20209133394 MINERA BARRICK MISQUICHILCA SA 273,366.02 2.20
6 20114915026 BHP BILLITON TINTAYA S.A. 242,514.15 1.95
7 20100136741 MINSUR S. A. 234,510.22 1.89
8 20100140340 CONSORCIO MINERO S A CORMIN 212,791.94 1.71
9 20100128218 PETROLEOS DEL PERU PETROPERU SA 205,331.50 1.65
10 20259829594 REFINERIA LA PAMPILLA S.A. 182,490.97 1.47
11 20100277485 PROCESADORA SUDAMERICANA S R L 160,077.29 1.29
12 20170072465 SOCIEDAD MINERA CERRO VERDE S.A.A. 157,638.27 1.27
13 20136165667 PESQUERA HAYDUK S.A. 134,835.07 1.08
14 20100142989 SHOUGANG HIERRO PERU S.A.A. 129,067.55 1.04
15 20100971772 GRUPO SINDICATO PESQUERO DEL PERU S.A. 128,047.39 1.03
16 20100079501 COMPAÑIA DE MINAS BUENAVENTURA S.A.A. 127,656.58 1.03
17 20504311342 PLUSPETROL NORTE SA 111,185.54 0.89
18 20332907990 EMPRESA MINERA LOS QUENUALES S.A. 102,066.31 0.82
19 20259150117 AYS S.A. 97,694.36 0.79
20 20304177552 PLUSPETROL PERU CORPORATION S.A. 87,895.53 0.71
21 20261677955 SOC MINERA REF DE ZINC CAJAMARQUILLA SA 83,641.68 0.67
22 20101362702 CONFECCIONES TEXTIMAX S A 83,535.11 0.67
23 20421226378 UNIVERSAL METAL TRADING S.A.C. 81,425.62 0.65
24 20224748711 CORPORACION PESQUERA INCA SA - COPEINC A 77,257.95 0.62
25 20192779333 COMPANIA MINERA ARES S.A.C. 74,193.03 0.60
26 20100047056 TOPY TOP S A 71,934.58 0.58
27 20132367800 MINERA AURIFERA RETAMAS S.A. 66,119.43 0.53
28 20100059224 DISENO Y COLOR S.A 65,715.67 0.53
29 20383045267 VOLCAN COMPANIA MINERA S.A.A. 65,374.40 0.53
30 20108928990 BHL PERU S.A.C 65,123.37 0.52
31 20338054115 AUSTRAL GROUP S.A.A 64,324.72 0.52
32 20340584237 CAMPOSOL S.A. 62,016.34 0.50
33 20466327612 ARUNTANI S.A.C. 61,689.89 0.50
34 20259880603 MOBIL OIL DEL PERU S.R.L. 58,908.22 0.47
35 20159473148 PESQUERA DIAMANTE S.A. 57,634.75 0.46
36 20380336384 PESQUERA EXALMAR SA 55,834.34 0.45
37 20100003512 INDUSTRIAS ELECTRO QUIMICAS S A 55,407.62 0.45
38 20213543505 ALEXANDRA S.A.C. 54,948.27 0.44
39 20137916437 TECNOLOGICA DE ALIMENTOS S.A. 53,508.25 0.43
40 20109989992 CIA MINERA AURIFERA SANTA ROSA S.A. 52,300.64 0.42

Este cuadro indica que el sector pesquero participa con 8 empresas dentro de las 40 primeras exportadoras del país.
Analizar la participación del sector pesquero, solamente en su volumen de exportaciones y/o aporte al PBI, y no mencionar su participación en el impuesto a la renta, induce a errores de apreciación y da una visión sesgada, porque finalmente es este impuesto del que dispone el Estado para ejecutar inversiones, gran parte de las cuales debieran hacerse en el propio sector. Parte de esta recaudación generada por el sector, debiera revertir al mismo para efectos de investigación que se traduzcan en medidas concretas para compensar los efectos negativos de una pesca excesiva y de una contaminación visible en todo el litoral.

Esta es una razón adicional para considerar necesaria una reforma tributaria, que permita incorporar a todos aquellos agentes que participan de las capturas de un bien nacional, y que, por tanto, están obligados a contribuir de alguna manera a su sostenimiento, por ser un recurso finito y difícilmente renovable.

Estamos ante estadísticas imperfectas, relativas y referidas tan solo a exportaciones y a contribuciones de empresas formales. El sector, sin embargo, acusa un alto grado de informalidad, es decir que una buena parte del mismo no tributa.


“Pescado fresco. Es lo que más se consume en el mercado interno, principalmente en Lima metropolitana (40%). Tradicionalmente el primer productor es Piura y toda la extracción para fresco se dedica al consumo nacional (no hay exportaciones, y estadísticamente se “nacionalizan” las importaciones. Pese a que la pesca artesanal se dedica principalmente a este rubro, el jurel, por ejemplo, que es la especie de mayor consumo popular, solo abastece hasta un 29% del mercado. Sin embargo, el hecho más saltante es la oferta de pescado reportado estadísticamente como “otros puertos”, desplazando en importancia al departamento de Piura en el abastecimiento de pescado fresco al país.
Son pocos los lugares que reflejan incremento de desembarque de fresco en el 2003 respecto al 2002, en cambio son bastante más los que reducen sus capturas. Excepto Ilo y el misterioso “otros puertos”, los lugares que incrementan sus volúmenes son relativamente pequeños.
Esto relativiza la fuerte crisis en la actividad pesquera artesanal y en general de abastecimiento para pescado de consumo humano, al disponerse de una oferta importante y creciente de pescado, que no permite percibir en precios y en cantidades la disminución de las capturas en la mayoría de lugares del país.
Evidencia que el mercado de pescados tiene una importante demanda a satisfacer y que se expresa en el abastecimiento externo, como la principal forma de consumo de pescado de los peruanos”. Sueiro, Cornejo y Castro en su libro “La Zona Costera peruana: recursos, usos y gestión

Hay un lugar de desembarque que estadísticamente se llama “otros puertos”. No se menciona en la estadística oficial del sector el nombre o nombres de esos “otros puertos”. Todos los puertos en los cuales se desembarca pescado son identificables y conocidos. Introducir el término “otros puertos” con una participación del 31.62% en los desembarques del 2003, induce a sospechar que no es pesca nacional.
Presumo que se refiere al ingreso de jurel congelado (que finalmente se vende al público descongelado), procedente de Chile. Lo que reconfirma que las políticas peruanas de promoción para la extracción de jurel no han tenido éxito. No existe flota peruana dedicada a la captura de jurel y caballa en forma sostenida, lo que obliga a ingresar ese recurso de Chile, con los efectos consiguientes, tanto de orden tributario como sobre el empleo y el desabastecimiento para la industria conservera y congeladora.
La información oficial no es más precisa y no indica cuál ha sido la modalidad de internamiento de este pescado al país.

¿Estas “importaciones” pagan impuestos? ¿Su comercialización, genera impuesto a la renta? No es posible hacer un seguimiento más preciso sobre precios, mercados finales y recaudación tributaria proveniente de este sector.

Una empresa con flota y planta de proceso integra en su balance el proceso extractivo y de proceso. Arroja resultados consolidados. Un armador puro expresa en su balance resultados solamente de capturas. Pareciera que no hay forma de discriminar los aportes tributarios por actividad, diferenciando extracción de procesamiento.


TRANSFERENCIA A GOBIERNOS LOCALES:
CANON PESQUERO
en soles en dólares
2003 14,182,000.00 4,090,568.21
2004 30,127,000.00 9,179,463.74

Estas transferencias representan, en relación al valor total de las exportaciones, el 0.40% para el 2003 y el 0.66% para el 2004.

Existe otro aporte realizado por los armadores. Este consiste en el pago de derechos de pesca que responde a un valor por tm de pescado extraído y declarado, que varia de especie a especie. No es materia de este análisis por cuanto no es posible de identificar en las estadísticas publicadas por la Sunat, y tampoco es ubicable en el portal de Produce

El Canon Pesquero está constituido por el 50% (cincuenta por ciento) del Impuesto a la Renta y los Derechos de Pesca a que se refiere la Ley General de Pesca pagado por las empresas dedicadas a la extracción comercial de pesca de mayor escala, de recursos naturales hidrobiológicos de aguas marítimas, y continentales lacustres y fluviales.
En el caso de empresas que además de extraer los recursos naturales hidrobiológicos, se
encarguen de su procesamiento industrial, se aplicará un factor sobre el Impuesto a la Renta pagado por dichas empresas a fin de determinar el monto del citado impuesto que será utilizado para calcular el Canon.

Los recursos que los gobiernos locales reciban por concepto de Canon, se utilizarán de manera exclusiva en gastos de inversión.

Derechos de pesca

Anchoveta, jurel y caballa pagaron el 0.075 de la UIT por tm hasta el 2003. Del 2004 hasta el 2006 pagan 0.116% de la UIT. Su recaudación está a cargo de Produce. Si se realiza pago oportuno, el armador puede descontar un 5% por pronto pago.
Para el 2005 significa en soles la cifra de 3.828 por tm extraída y para el 2006 la sifra de 3.944 soles por tm extraída. Cifras sin considerar el 5% de descuento. US$1.20 por tm aproximadamente para el 2006. Llevado a rendimiento para harina de 4.4 se tiene que una tonelada de harina paga US$. 5.30 como derechos de pesca.


De la recaudación total de impuesto a la renta durante el período 1998-2004, el sector pesquero, tanto de consumo humano directo como de consumo humano indirecto, ha participado con el 0.52%

De las exportaciones totales del país durante el mismo período de 1998 al 2004, el sector pesquero de consumo humano indirecto (harina y aceite) ha participado con el 10.44 %. El sector de consumo humano directo ha participado con el 2.70%. Entre ambos, su participación es del 13.14%, una cifra importante.

Comentarios

Un juego de cifras. Las exportaciones de harina en el período (7 años) fueron de 5,155’960,000 dólares.
Si dividimos la cifra entre un precio promedio de 550 dólares por TM tendremos la cantidad de 9´374,472.73 toneladas de harina exportadas.
Si calculamos un rendimiento de 4.3, tendremos la cantidad de 40´310,232.73 toneladas de materia prima.

Aproximadamente cuarenta millones de toneladas de peces, entre anchoveta y otros, han sido reducidos a harina, con los consiguientes efectos sobre el ecosistema. No conozco estudio alguno que cuantifique y analice los efectos que esta disminución de la biomasa de anchoveta, jurel y caballa (estos últimos hasta que se prohibió su reducción a harina) haya causado en las poblaciones de aves y en el resto de especies de la cadena trófica.

Cualquiera que haya sido dicho efecto, el país ha recibido vía impuesto a la renta, la suma de 141 millones de soles, que en promedio anual (por los 7 años analizados) representa la cifra de 20’157,143 soles. Cifra que convertida a dólares a un cambio promedio de 3.40 nos da 5’928,571 dólares por año. Esta cifra corresponde a todo el sector pesquero. No se encuentra, en la estadística de la Sunat desglose alguno para poder determinar cuanto de esta cifra corresponde solamente al consumo humano indirecto.

Sobre 7,190 millones de dólares exportados en el período, el aporte para el Estado ha sido de 41 millones 500 mil dólares (141 millones cien mil soles) por concepto de impuesto a la renta.
O sea que el 0.58% del valor FOB de las exportaciones totales del sector pesquero ha ingresado a la caja fiscal como impuesto a la renta producida por el sector.

La exportación no tradicional (otros) se refiere a conservas, congelado, curados, fresco refrigerado y peces vivos y ornamentales. La tradicional se refiere a harina de pescado y aceite.

No están consignadas en este análisis las cifras de ventas del mercado interno, tanto a nivel mayorista como minorista, ni en playa. En todo caso, por tratarse de pesca proveniente del sector artesanal y no sujeta a IGV, probablemente no tengan un registro tributario. Las ventas al por menor tampoco reflejan cifras. A nivel de comerciantes mayoristas sí debiera tener un reflejo estadístico en alguna parte, pero no se puede determinar si este se considera en la percepción de rentas de tercera categoría provenientes del sector pesca.
¿La pesca artesanal tributa? No hay forma de evaluar las cifras de comercialización en el mercado interno de la misma forma que las exportaciones. Se requiere una estadística más precisa. Todo el movimiento que genera el consumo interno de pescado en sus diferentes presentaciones no tiene nivel de registro que permita evaluar su participación en la recaudación, si es que la tiene.

Si la asignación de cuotas individuales de pesca mejora la eficiencia del sector, y por consiguiente mejoran sus resultados económicos, es probable que la recaudación tributaria mejore.

La flota industrial causa un impacto directo sobre la biomasa, y otro impacto sobre el mar a través del vertido de aguas sucias y residuos oleosos procedentes de la embarcación. Y en las bahías además se produce el impacto del agua achicada proveniente de las bodegas.
La flota artesanal genera efectos similares, además del vertido de aguas sucias procedentes del lavado de la pesca en el muelle.
Las plantas de proceso generan impactos sobre el medio ambiente a través de la emisión de gases contaminantes y el vertido de desechos al mar.

Ambas actividades, industrial y artesanal, generando utilidades y debiendo aportar impuesto a la renta, sean altas o bajas, causan un efecto sobre los recursos pesqueros y sobre el ecosistema. La extracción de peces se produce con independencia de la determinación contable sobre si hubo o no hubo utilidad. La contaminación producida por las plantas, así como la reducción de pescado en harina también se produce, con o sin utilidad.
El país requiere una compensación económica por el efecto de este impacto sobre dichos recursos naturales.

Dado que los recursos son finitos, el reordenamiento tributario debe comprender medidas que alcancen a todos los agentes extractivos del sector, es decir a toda la pesca, tanto industrial como artesanal.

El norte del país carece de muelles y desembarcaderos adecuados, así como mejores vías de comunicación hacia las caletas pesqueras. Los existentes requieren de mantenimiento e inversión importante, sobre todo en almacenamiento refrigerado y condiciones sanitarias mínimas. El sector puede exigir inversión por parte del Estado, en la medida que aporta con tributos suficientes y adecuados para ello.

El sector debiera tener la obligación de contribuir a la mejora de estos aspectos, que a su vez significan una mejora en su propia operatividad. Mejores muelles de desembarco y mejores condiciones sanitarias, mejorarán la calidad de la exportación de los productos que por este conducto llegan a las plantas de proceso, y por consiguiente mejorará la rentabilidad. De igual forma que una denominación de origen y un sistema de ecoetiquetado también lo haría.

El sector en su conjunto comprende la extracción industrial y artesanal, la producción y exportación de productos tradicionales y no tradicionales, y la comercialización en el mercado interno.

Pocos programas de gobierno prestan o han prestado atención a estos detalles, destacando principalmente a la agricultura y a la minería descuidando que el sector pesquero requiere de una nueva política y de una reforma tributaria, de la cual no se habla. Las cifras de participación en el PBI y en las exportaciones nos distraen del aporte tributario, que es el único que sirve para propósitos prácticos.

Una política pesquera que planifique un desarrollo sostenible para el corto, mediano y largo plazo, basada en un ordenamiento ecosistémico, y en cuotas individuales de pesca, sería insuficiente si no actuase sobre la tributación. La actividad del sector debe ser rentable y generadora de impuestos que el Estado debe aplicar, en parte, al mejoramiento general del sector.

El Estado, como administrador de los recursos pesqueros que pertenecen a toda la Nación, debe ser un organismo preocupado de establecer un adecuado balance entre la explotación de recursos finitos, y su tributación. El beneficio de la extracción tiene que alcanzar a todos los peruanos y no solamente a un reducido grupo de ellos.

Ello implica, que el Estado tiene también la obligación de ser eficiente y honesto en el manejo de los tributos que recauda. Todo un reto para la próxima administración.

El reto del próximo gobierno consiste en implementar una adecuada reforma del Estado, establecer una política pesquera de beneficio para la Nación, y en manejar los recursos fiscales con transparencia y honestidad, los cuales también tienen que ser aportados por el sector pesquero en una justa y correcta proporción a su actividad.

El reto de la población consistirá en comprender que todos tenemos que aportar con impuestos con la garantía y seguridad de que serán bien utilizados y no dilapidados por una administración ineficiente, a la cual tenemos que fiscalizar, exigir y controlar.

El reto de nuestras próximas autoridades consistirá en ser eficientes, moralmente íntegros y honestos, manejando los recursos a su disposición con integridad, transparencia y visión de futuro.

Los planes de gobierno que deberán presentar los candidatos, tienen que ser examinados en detalle para que posteriormente el país exija su ejecución y ejerza el debido control sobre los mismos.

Desarrollo sostenible de la pesca

La soberanía alimentaria precisa de mecanismos tributarios, y medidas de conservación, manejo y gestión que involucren directamente a la pesquería industrial y a las comunidades de pescadores y trabajadores de la pesca artesanal para administrar el bien común que representa la riqueza pesquera del país.
La pesquería es una actividad importante y está sometida a pesca excesiva, lo que malogra los beneficios potenciales de la actividad pesquera.
Cambios en los ecosistemas inducidos por los seres humanos, como los cambios causados por la actividad pesquera, están poniendo en peligro el bienestar de las generaciones actual y futuras. La industria pesquera tiene una capacidad de captura muy superior a la tasa a la que los ecosistemas pueden producir pescado, por lo que los recursos así como el capital de origen humano y los recursos humanos, no se están utilizando eficazmente. La eficacia con que se distribuyen los beneficios en relación con el bienestar de un gran número de personas ofrece dudas, como se aprecia en la recaudación tributaria por impuesto a la renta.
El desarrollo sostenible de la pesca exigirá una mejor forma de ordenamiento.
Para colocar la actividad pesquera en un contexto de desarrollo sostenible, las políticas deben afrontar específicamente las relaciones recíprocas entre el presente y el futuro en lo que respecta al agotamiento de las poblaciones ícticas, así como a los efectos perjudiciales de la actividad pesquera (u otras actividades económicas), los asentamientos costeros y el vertido de residuos sobre el ecosistema marino.
La ordenación pesquera para el desarrollo sostenible es una actividad que tiene muchas dimensiones y muchos niveles y debe tener en cuenta consideraciones más amplias que la mera supervivencia de las poblaciones ícticas y la pesca.

Necesidad de un enfoque precautorio basado en el ecosistema para mejorar el ordenamiento pesquero
http://www.fao.org/DOCREP/003/W6914S/W6914S03.htm
Una interdependencia ecológica es definida cuando existe cierta relación entre dos stocks explotados o bien entre diferentes componentes poblacionales de un mismo stock (e.g. reclutas y adultos). En base a ello se definen dos tipos de interacciones: Competencia y depredación.
La competencia se define en base a los efectos negativos que un organismo ejerce sobre otro al consumir o interferir en el acceso a un recurso cuya disponibilidad (oferta) está limitada. Esta interacción lleva a la reducción en la supervivencia, crecimiento y/o reproducción de los competidores, en especial el jerárquicamente subordinado. Es necesario discernir entre competencia interespecífica e intraespecífica, debido a que las consecuencias de estos procesos desde un punto de vista ecológico pueden ser muy diferentes. Los mecanismos por los cuales los competidores interactúan distinguen a la competencia por interferencia y por explotación.
Por medio de la dominancia competitiva una especie inhibe a otra en el uso de un recurso, ya sea a través de explotación o interferencia: el individuo competitivo dominante ó superior disminuye la abundancia del recurso limitante al competitivo subordinado ó inferior y en casos de recursos sedentarios tiende a establecer la monopolización en el uso del sustrato primario y en consecuencia un monocultivo. La visión diferencial de la competencia desde la perspectiva del dominante o subordinado tendrá relevancia en un contexto ecológico-pesquero, al evaluar los efectos bioeconómicos derivados de esta interdependencia ecológica.
La depredación es el consumo de un organismo (presa) por otro (depredador) a través de carnivoría, herbivoría u omnivoría. Un depredador puede ser clasificado de acuerdo a la amplitud de su dieta en monófago, oligófago y polífago, o también en especialista (monófagos y oligófagos) y generalistas (polífagos) según si reacciona o no a perfiles de abundancia de presas. Exhibe preferencia trófica por alguna presa cuando la proporción de ésta en su dieta alimentaria es mayor que la proporción en el ambiente. Estos conceptos serán tomados en cuenta al evaluar el significado de dicha interdependencia ecológica en pesquerías.
Como consecuencia de lo anterior, la respuesta de una comunidad a la presión pesquera dependerá de la magnitud de las interacciones entre las especies, así como del papel funcional de la especie objeto de explotación. En efecto, características del depredador, tales como su espectro trófico, selectividad (especialista ó generalista) y eficiencia de depredación, así como de las presas (si compiten ó no y si la competencia es simétrica o no) incidirán en la respuesta de la comunidad a la explotación y por tanto sus efectos tendrán muy disímiles consecuencias a nivel pesquero y ecológico. A modo de ejemplo, la depredación sobre un competidor dominante tenderá a incrementar la diversidad en una comunidad, mientras que la explotación de especies claves puede conducir a una simplificación de la comunidad y disminución de la diversidad. Ambas situaciones muestran la existencia de múltiples estados de equilibrio en una comunidad. De acuerdo a los niveles de explotación, la magnitud de las interdependencias pueden ser modificadas y el esquema de manejo y regulación de los recursos alterado.
Tanto la pesquería como las interacciones ecológicas, el ambiente físico y el desarrollo dinámico del sector pesquero tienen efectos en el recurso, con un retraso diferencial en su impacto. En el estado actual del conocimiento, la alternativa más viable parece ser el manejo adaptativo, esto es, manejar a través de experimentación, cambiando deliberadamente los niveles de esfuerzo a efectos de entender la dinámica de la comunidad y la pesquería. Esta estrategia permite la inclusión de mecanismos de control y regulación a corto plazo en respuesta a un flujo continuo de información sobre variaciones en el estado de un recurso.
Los efectos de diferentes tipos de regulación, incluyendo asignación de cuotas de pesca, cuotas individuales transferibles, rotación de áreas de pesca, asi como la variabilidad en el descarte producida por la puesta en práctica de algún tipo de medida especie-dirigida, deberán ser considerados a través de modelos de optimización con criterios múltiples. En caso contrario,
“el manejo de recursos multiespecificos permanecerá probablemente como un arte, más que una ciencia, y la asignación de altos presupuestos dirigidos a resolver problemas científicos relacionados con el manejo de pesquerías multiespecíficas será injustificado en términos de los beneficios potenciales que se lograrían” (Clark, 1985).

Las administraciones pesqueras tienen la necesidad de conocer, de manera sistemática, los posibles impactos bioeconómicos resultantes de estrategias alternativas para el manejo sostenible de recursos pesqueros. Se requiere determinar cuáles instrumentos de política pesquera deberían de utilizarse para satisfacer criterios biológicos y económicos. Entre los criterios que pudieran identificarse se encuentran los siguientes: nivel de biomasa de las especies objetivo e incidentales (incluyendo especies amenazadas), capturas por especie, flota y país, ingresos netos obtenidos por las flotas artesanales e industriales, empleos directos, generación de divisas y contribución a la producción alimentaria de la región.

Es en este sentido que el flujo intertemporal de costos y beneficios de estrategias alternativas de manejo requiere estar sustentado en un análisis robusto de la estructura dinámica de las poblaciones, tanto objetivo como incidentales.

Asimismo, la preocupación creciente de las administraciones pesqueras en el sentido de incorporar criterios no monetarios en el análisis, tales como conservación de la biodiversidad marina, protección de especies amenazadas que son capturadas incidentalmente, y otros valores sin precio (valor de existencia y valor de demanda opcional), necesitan enfoques novedosos para conciliar criterios económicos-ecológicos en muchas ocasiones conflictivos entre sí.

Se desea, por una parte, maximizar el valor presente de los beneficios netos recibidos por los diferentes usuarios de los recursos (e.g. pescadores artesanales y pescadores industriales), y por otra, que la abundancia de las especies objetivo e incidentalmente capturadas se mantengan en niveles que impidan su sobreexplotación o agotamiento.