Chile - Pesquería del jurel recupera protagonismo en la economía regional

miércoles 29 de diciembre de 2021

Chile - Pesquería del jurel recupera protagonismo en la economía regional

Por Luis Carvajal
Diciembre 27, 2021

A nivel global, se autorizó la extracción de 900.000 toneladas de jurel el próximo año, donde la región del Biobío cuenta con 581 mil toneladas de esta cifra global.

La actividad pesquera va por buen camino en la búsqueda de revitalizar la extracción de nuestro principal recurso pesquero, el jurel. En la década de los 90, el país explotaba en el orden de 5 millones de toneladas de jurel, no existiendo ninguna regulación en su extracción. Eso significó casi el exterminio del pez pelágico de las costas chilenas en 2010, reduciendo su extracción a no más de 200 mil toneladas/año.

Esa realidad se revirtió gracias a las medidas de control, como una drástica reducción de cuotas y exigencia de tallas mínimas entre otras, a partir de ese año. Actualmente, el jurel vive tan buen momento que hace siete años, Chile estaba autorizado para extraer 297 mil toneladas de jurel y en 2021 la Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (ORP-PS), autorizó la extracción de 504.869. aumentando la cuota para este próximo 2022 a 581 mil toneladas, un abultado 15% más que el 2021, dejando todos los lineamientos preparados para la nueva temporada comienza los primeros días de enero y se extiende normalmente hasta julio del 2022.

Según datos de Asociación de Industriales Pesqueros (Asipes) en 2021, los pescadores industriales del Biobío capturaron más de 430 mil toneladas de jurel, de las cuales el 85% fue destinado al consumo humano directo, lo que se tradujo en la elaboración de 94 millones de conservas y más de 230 mil toneladas de congelados de este recurso.

En el caso de las conservas de jurel el 60% de la producción se destina a mercados nacionales. En el caso de los productos congelados de jurel ha aumentado el consumo nacional, producto de eso hoy los filetes y lomos de jurel se quedan en un 40% en el mercado nacional y el jurel entero congelado, más del 90% se exporta principalmente al mercado africano.

Este arduo esfuerzo sirvió para que en 2019 la pesquería chilena del jurel fuera certificada internacionalmente bajo el estándar de sostenibilidad Marine Stewardship Council (MSC), que confirma que la pesquería actualmente está bien gestionada, salvaguarda los recursos marinos y asegura su conservación para las generaciones futuras.

Además del jurel, en Chile están certificadas con MSC las pesquerías industriales del camarón nailon, langostino amarillo y langostino colorado de las zonas centro norte y centro sur del país, la merluza austral de la zona sur, además del krill de la zona antártica.

PUNTAL DE LA ECONOMÍA DEL BIOBÍO

La presidenta de la Asipes Macarena Cepeda Godoy, declaró que la pesca industrial ha sido considerada en pandemia un rubro esencial, ya que, “hemos podido seguir operando con dinamismo, siendo un verdadero motor económico y una actividad estratégica en esta parte del país que, además, ha logrado proteger los más de 6.500 empleos directos y los más de 11.500 empleos indirectos que dependen de ella en la Región del Biobío. Esto nos permite señalar que nuestro sector ha sostenido la tranquilidad de miles de familias en Talcahuano, Coronel, Tomé y otras colindantes al Gran Concepción, dijo la dirigente gremial.

Cuenta de esto da, a su vez, el presidente de los patrones de pesca, Juan Carlos González quien hizo un balance de este 2021. “Fue una muy buena temporada de pesca, durante estos dos años de pandemia los centros pesqueros no han parado y los trabajadores nos encontramos contentos porque el próximo año se vislumbra una muy buena temporada con una cuota más grande”.

El dirigente sindical agrega que este año no se contrató personal embarcado, pero con esta nueva cuota las compañías van a poner en operación nuevas naves y eso significa más personal. “ Nosotros vemos desde la perspectiva laboral que se deberían poner en operación 2 o 3 barcos, eso es muy interesante porque significa tripulaciones completas y genera una cadena de trabajo, no solo en el puerto, sino que también en el área de la mantención, redes, descarga, transporte y para eso se necesita personal, personas nuevas que participen. Existen plazas de trabajo y necesitamos nuevas generaciones jóvenes que participen de nuestra actividad, que está siendo bien remunerada y nos está faltando gente”, aseguró Juan Carlos González.

Este arduo esfuerzo de resguardo del recurso jurel sirvió para que en 2019 esta pesquería chilena fuera certificada internacionalmente bajo el estándar de sostenibilidad Marine Stewardship Council (MSC), que confirma que la pesquería actualmente está bien gestionada, salvaguarda los recursos marinos y asegura su conservación para las generaciones futuras.

Además del jurel, en Chile están certificadas con MSC las pesquerías industriales del camarón nailon, langostino amarillo y langostino colorado de las zonas centro norte y centro sur del país, la merluza austral de la zona sur, además del krill de la zona antártica.