¿Formalizar la pesca artesanal, soluciona sus problemas?
Autor: Francisco J. Miranda Avalos, Presidente de la J. Directiva de la ONG Oannes
jueves 23 de agosto de 2018
El Ministerio de la Producción esta trabajando una nueva norma para acabar con la ilegalidad en la pesca de una vez por todas. Sin embargo parte de la solución que proponen es formalizar a un numero de embarcaciones artesanales, que considerando sus propias cifras, significaría tener una flota totalmente formalizada que duplica la flota pesquera artesanal formal actual.
La intención del ministerio es acabar con la construcción de embarcaciones ilegales, que incrementan el esfuerzo pesquero artesanal. Pero al dar facilidades para que una flota que se ha creado en la ilegalidad se formalice, se estaría creando un incentivo perverso, que podría interpretarse muy al estilo peruano; “si construyo mi embarcación, hoy será ilegal, pero mañana el próximo gobierno me la legaliza y asunto resuelto”.
El problema es que no hay recursos para todas las embarcaciones, a mas embarcaciones menos recursos para cada una. Y tampoco había muchos recursos antes cuando se prohibió la construcción de nuevas embarcaciones. Pero a quienes las construyeron y las pusieron a pescar no les importo y ahora estarán felices con la formalización de una flota artesanal que nació sin permiso y debería desaparecer precisamente para disminuir el esfuerzo pesquero artesanal.
La Ley General de Pesca, considera pesquería artesanal a toda practica pesquera que se hace con predominio del trabajo manual, embarcaciones de 32.6 M3 de capacidad de bodega y una eslora máxima de 15 Mt. Sin embargo dentro de este grupo de pescadores, existen 3 tipos claramente diferenciados.
El primer grupo es el pescador artesanal de orilla, embarcado y no embarcado, o llamado por muchos pescadores también “pescador selectivo”. Este grupo en particular es la razón de ser de muchas normas que el estado peruano ha dado a través de la historia reciente, básicamente por que muchos pescadores artesanales tienen conocimientos ancestrales que el estado pretende proteger, y sobre todo por que su esfuerzo pesquero es selectivo, de menor cuantía y bajo impacto.
Este grupo como ya hemos dicho se diferencia claramente de los demás, por que practica su pesquería en lugares no muy lejanos de la vista de costa, y principalmente en fondos rocosos o madrepóricos, cavernosos, o planos con praderas de algas, que alcanzan máximo los 80 metros de profundidad, que es la profundidad máxima a la que llega la luz solar. Estos medio ambientes son los que concentran la mayor biodiversidad bentónica costera y donde el pescador artesanal de orilla embarcado o no embarcado practica sus faenas.
Este grupo incluye a pescadores de cordel de orilla, saltamocheros, rascaplayas, chichorreros, que son los “no embarcados”, y los cortineros, pinteros y buzos con compresora que son los “embarcados”.
Valga la verdad, muchos de estos pescadores pueden resultar siendo también tripulantes de otras embarcaciones artesanales o industriales. La mayoría de los pescadores son “mil oficios”, solo una minoría es mano de obra constante, calificada y con experiencia. Entre ellos suele surgir siempre alguien con actitudes de emprendedor o empresario, que frecuentemente es un patrón de lancha exitoso, que ha logrado construirse una embarcación y contratar pescadores como tripulantes. Los fundadores de muchas empresas de la pesqueria peruana de anchoveta, fueron patrones de pesca exitosos.
Eso genera un segundo grupo en la pesca artesanal, nosotros los identificamos como “los bolichitos” en el sur, centro y norte o los “arrastreros artesanales” del norte ecuatorial.
Los bolichitos usan la técnica del cerco o boliche para sus capturas y pescan anchoveta, caballa, cojinova, corvina, jurel, lorna, cabinza. Pero gran detalle; no hay bolichito que no use “macaco”, y el usar un “macaco” no significa “uso predominante del trabajo manual”, el “macaco” es un equipo hidráulico que permite calar redes de gran peso y tamaño, algo que manualmente seria imposible manipular. Pero si se pretende ser artesanal, no debería tener un equipo hidráulico como un “macaco”, la red debería recogerse a mano.
El “arrastrero” artesanal, tampoco tiene un predominio manual, cuentan con winches para halar sus redes y su practica por ser “arrastre de fondo” costero, es muy destructiva con los fondos marinos y "barre" los hábitats de las especies objetivo de los pescadores selectivos o de orilla. Eso en el norte del Perú donde la plataforma es extensa y la biodiversidad costera abundante, representa un serio conflicto entre dos pesquerías artesanales.
“Los bolichitos” y los “arrastreros” aunque son artesanales, están prohibidos y no deberian pescar entre la milla 0 y la milla 3, lo dice expresamente el DS 005 – 2017. Y esto se hizo para proteger precisamente los caladeros de la pesca artesanal de orilla o selectiva. Sin embargo los pescadores de orilla, se siguen quejando de permanentes violaciones de la milla 3 por parte de estas embarcaciones. “Ellos si calan hasta en la milla 0 y capturan las especies que nosotros buscamos y no les interesa las tallas mínimas, ni la depredación que hacen de los fondos rocosos o sus cercanías”; me dicen constantemente diferentes representantes de las asociaciones de pescadores artesanales de orilla. A lo que agregan, “La depredación del borde costero la hacen los bolichitos artesanales o arrastreros artesanales, no las embarcaciones industriales; lo que pasa es que un ojo inexperto no sabe diferenciar entre una embarcación pequeña y otra grande.
Pero también están los intereses de diversos propietarios de “bolichitos o arrastreros artesanales”, algunos gremios o asociaciones los agrupan y muchos pescadores buscan asumir la dirigencia de una asociación o gremio, para hacerse conocidos políticamente y escalar a otros puestos, incluso públicos, no para defender al pescador artesanal de orilla o selectivo, sino los intereses de los propietarios de los dueños de estas embarcaciones…que ya son empresas en mas de un caso y que en muchos casos son ellos mismos.
Durante muchos años, el que estas embarcaciones no tuvieran sistema de seguimiento satelital, ha hecho prácticamente imposible confirmar que si pescan dentro de la milla 3, algo que les esta prohibido, pero que sin embargo hacen a vista y paciencia de sus colegas pescadores de orilla. El PRODUCE dentro de las nuevas normas a salir, pretende que todas estas embarcaciones tengan un sistema de seguimiento satelital, lo cual sin duda es muy positivo, ya que el seguimiento permitirá estudiar mejor los movimientos de esta flota y mejorar su gestión.
Acogerse al régimen artesanal, permite a muchas empresas exonerarse de impuestos y pagos por derechos de pesca. Y es la razón principal por la que empresas o personas naturales quieren engrosar las filas de los “pescadores artesanales”, y aunque algunos pescadores aseguran que pagan 3.5 Soles por tonelada capturada a sus gobiernos regionales, esto no es propiamente un “derecho de pesca” y además no se sabe que uso le dan los GOREs a esa recaudación.
Otra “ventaja” del régimen artesanal es precisamente el caos en que existe, permitiendo que muchos tripulantes se embarquen sin documentos, en un mar de corrupción que también el PRODUCE quiere acabar, por que en la nueva norma, si no estas debidamente documentado, no podrás embarcarte...bueno siempre ha sido asi, solo que no se cumple, y la gente se hace maña para entregar documentos falsos y cosas asi.
Finalmente están los llamados “artesanales de altura”. Este grupo se dedica básicamente a la pesca de la pota y del perico, según la estación. Esta flota es capaz de capturar cerca de 500 Mil Tm de pota y unos 3 mil toneladas de perico al año. Produciendo exportaciones que alcanzan los US$500 millones al año, navegando mas de una ves mas allá de las 200 millas. Si bien en estas embarcaciones si predomina el trabajo manual, al acogerse al régimen artesanal, no pueden tener embarcaciones de mayor eslora que los 15 metros.
Esto resulta muy importante, por que la capacidad de bodega de 32.6 M3 es mas que suficiente para una embarcación artesanal, pero con 15 metros de eslora, es complicadísimo contar con mayores depósitos de combustible, camarotes para la tripulación, y baños adecuados; para un trabajo que se realiza por 10 o 15 días de pesca y navegación lejos de la costa.
Si bien las nuevas normas que PRODUCE busca emitir, muestran la clara intención del ministerio en poner orden y disciplina en un actividad tan importante como la pesca artesanal. Los miedos de todos se centran en si en realidad la norma cumplirá el objetivo de reducir el esfuerzo pesquero artesanal y acabar con las nuevas construcciones de embarcaciones pesqueras. Nadie quiere tener una nueva formalización de embarcaciones ilegales en el futuro. No se debe construir una nave mas y punto.
Oannes cree que hay que modificar la Ley General de Pesca en muchos de los conceptos que ya están obsoletos o demasiado intricados. Pero vemos que eso difícilmente sucederá en los años venideros. Sin embargo insistimos en que es un punto importante, ya que se pretende instaurar un sistema de gestión mediante cuotas para cada pesquería artesanal que si podría solucionar uno de los grandes problemas de la pesquería artesanal, lo que por cierto suena bastante genérico, ya que teniendo tres tipos de pesquerías artesanales, cada una tiene sus propios problemas que solucionar, uno de ellos la interferencia del “bolichito artesanal” en sur, centro y norte del país, y los “arrastreros artesanales” al norte de Piura, con los caladeros de la pesca artesanal de orilla o selectiva.
Para Oannes, los caladeros del pescador artesanal de orilla, deben ser preservados de todo acto de sobrepesca o depredación, no solo son medio ambientes delicados que requieren una gestión especial, sino que además conservan una biodiversidad que incluye muchos peces y mariscos nativos que son vitales para el desarrollo de la acuicultura marina nacional.